domingo, 17 de mayo de 2009

Información del Equipo

Integrantes:
Daniela García Farré
Ursula Rebollar
Daniel Romero Abundio
Grupo:
4010
Colegio Madrid
Instituto de Enseñanza México-Española

Terremoto del 85, México, Distrito Federal

TEMBLOR DEL 85

Justificación:

Escogimos éste tema porque quisimos investigar un suceso que marcó significativamente la historia de nuestro país, sus consecuencias y la manera en que la sociedad lidió con éste.

Objetivos:


¿Cuál fue la reacción del gobierno ante el temblor?
¿Cuál fue la reacción de la sociedad ante el temblor?
¿Cuáles fueron las consecuencias sociales?
Proceso de recuperación

¿Qué es un sismo?

Es el resultado del movimiento relativo de las placas que forman la litosfera terrestre. En México las placas principales son:

Placa de Cocos
Placa del Pacífico
Placa Norteamérica
Placa del Caribe

El temblor del 85 se produjo por el choque de la Placa de Cocos con la de Norteamérica y fue lo que ocasionó el desastre en la ciudad de México el 19 de Septiembre de 1985.
México es un país altamente sísmico debido a que su costa del Pacífico esta en el borde de una Zona de Subducción.



Más sobre el temblor...

El Epicentro del Terremoto fue localizado por el Servicio Sismológico Nacional a 17.6 N y 102.5 W, en el Océano Pacifico frente a la desembocadura del Río Balsas. Su hora de origen fue a las 07:17:48.5 horas local del día 19 de Septiembre de 1985; Su magnitud fue de 7.8 (Ms) o de 8.1 (Mw)



Este sismo generó un maremoto, que es el primero que se haya registrado y observado científicamente en México. El fenómeno se conoce técnicamente como "tsunami". La altura máxima fue de dos metros y centímetros; no causó daños de consideración, ni víctimas.
Las zonas más afectadas se situaron en el centro del valle de México.
El sismo del 19 de Septiembre de 1985 responde a las características que se pensaba podría tener un sismo característico en al brecha de Michoacán; pero sus efectos a una distancia de 400 kms (Distrito Federal) superaron cuanto cabia imaginar para un sismo de esta magnitud.

Los efectos y daños observados en las poblaciones y los daños alrededor del epicentro se caracterizan por medio de la intensidad observada en cada sitio. El mapa muestra las intensidades sentidas durante el terremoto del 19 de Septiembre. En ciertas zonas, las intensidades reportadas son más altas que en las regiones inmediatamente vecinas, reflejando los efectos de amplificación de la energía sísmica ocacionados por la geología local.




"La destrucción que provocó el Terremoto de 1985 cambió la fisonomía y la vida de la ciudad de México. En los escombros de la incompetencia gubernamental para atender la emergencia quedó sepultada la resignación de sus habitantes. La catástrofe natural arrasó inmuebles, cegó miles de vidas y precipitó el derrumbe del PRI en la capital. La solidaridad de millones en el rescate de víctimas y en apoyo a las familias afectadas, se transformó en un despertar de conciencias, en un movimiento que logró la reconstrucción de la ciudad desde abajo. Después del temblor ya nada fue igual.
El desmoronamiento de la sumisión y el esfuerzo comunitario fueron el acta de nacimiento de la sociedad civil"
Jesús Ramírez Cuevas, masiosare, DOMINGO 11 DE SEPTIEMBRE DE 2005

"la tierra se movió, todo crujía; un estruendo, ante nuestros ojos el edificio Nuevo León se vino abajo, una enorme nube de polvo lo oscureció todo. Después, sólo quedó el silencio" así recuerda ese momento Cuauhtémoc Abarca, residente de Tlatelolco y a la postre, dirigente de los damnificados.



Los efectos y daños observados en las poblaciones y los daños alrededor del epicentro se caracterizan por medio de la intensidad observada en cada sitio. El mapa muestra las intensidades sentidas durante el terremoto del 19 de Septiembre. En ciertas zonas, las intensidades reportadas son más altas que en las regiones inmediatamente vecinas, reflejando los efectos de amplificación de la energía sísmica ocacionados por la geología local.

"La destrucción que provocó el Terremoto de 1985 cambió la fisonomía y la vida de la ciudad de México. En los escombros de la incompetencia gubernamental para atender la emergencia quedó sepultada la resignación de sus habitantes. La catástrofe natural arrasó inmuebles, cegó miles de vidas y precipitó el derrumbe del PRI en la capital. La solidaridad de millones en el rescate de víctimas y en apoyo a las familias afectadas, se transformó en un despertar de conciencias, en un movimiento que logró la reconstrucción de la ciudad desde abajo. Después del temblor ya nada fue igual.
El desmoronamiento de la sumisión y el esfuerzo comunitario fueron el acta de nacimiento de la sociedad civil"
Jesús Ramírez Cuevas, masiosare, DOMINGO 11 DE SEPTIEMBRE DE 2005



"la tierra se movió, todo crujía; un estruendo, ante nuestros ojos el edificio Nuevo León se vino abajo, una enorme nube de polvo lo oscureció todo. Después, sólo quedó el silencio" así recuerda ese momento Cuauhtémoc Abarca, residente de Tlatelolco y a la postre, dirigente de los damnificados.

"Fueron días especiales. La ciudad era otra. Por donde quiera había personas llevando y trayendo ayuda. Al principio, los medios de comunicación ayudaron mucho a poner en contacto a las familias, informando de los daños; después pusieron en marcha la campaña oficial de que aquí no pasa nada. El gobierno quiso minimizar el problema y decía 'quédense en casa, no salgan', pero la gente no hizo caso", rememora Leslíe Serna, fundadora de la Unión Popular Nueva Tenochtitlán Sur.

"En la UNAM se formaron brigadas que trabajaron durante meses. En repetidas ocasiones nos enfrentamos al ejército, alguna vez hasta a pedradas, porque algunos soldados se dedicaron a sacar bienes sin importarles la gente atrapada", relata Imanol Ordorika, que participó en la Brigada Ciencias integrada por unos 150 estudiantes y maestros, como lo hicieron en otros centros educativos.
De la tragedia surgió una respuesta civil que ganó el derecho a la ciudad para los ciudadanos y logró la reconstrucción de 80 mil viviendas. La espontaneidad halló agentes sociales organizados que ayudaron dar un vuelco a la situación. "Fue un movimiento que modificó la vida social y política de la capital", señala Serna.

Consecuencias

Consecuencias sociales

En el artículo periodístico del periodista Carlos Monsivais acerca de la reacción del pueblo mexicano, ante la tragedia escribió:

"De todas partes llegan a sumarse a los bomberos, a los granaderos, a los trabajadores del Departamento Central y de las delegaciones, a los policías del DF y del estado de México. Convocada por su propio impulso, la ciudadanía decide existir a través de la solidaridad, del ir y venir frenético, del agolpamiento presuroso y valeroso, de la preocupación por otros que, en la prueba límite, es ajena al riesgo y al cansancio. Sin previo aviso, espontáneamente, sobre la marcha, se organizan brigadas de 25 a 100 personas, pequeños ejércitos de voluntarios listos al esfuerzo y al transformismo: donde había tablones y sábanas surgirán camillas; donde cunden los curiosos, se fundarán hileras disciplinadas que trasladan de mano en mano objetos, tiran de sogas, anhelan salvar siquiera una vida."

El pueblo mexicano demostró una vez más que es capaz de reaccionar socialmente y sobrepasar con solidaridad al gobierno, para protegerse de cualquier siniestro. Es importante enumerar algunas consecuencias de una tragedia como la del temblor del 85.
Después del terremoto, mucha gente quedó sin trabajo, pero por otro lado se iniciaron muchos trabajos de reconstrucción.
La gente se dió cuenta de lo vulnerable que podía ser en esta ciudad, y mucha gente se fue a vivir a la provincia. Se establecieron sistemas de alarmas sísimicas, en escuelas, edificios y dependencias del gobierno y hubo una serie de cambios en la actitud de toda la ciudad, para enfrentarse a un terremoto o a cualquier desastre.

Algunas voces se han levantado pidiendo protección civil.

"Prevenir cuesta pero cuesta mucho más no prevenir" expresó De La Fuente al inagurar la exposición sobre sismos en el museo Univeresum.

"Luego de que se aprobó la creación del Consejo Consultivo sobre Sismos (CoCoS), a propuesta de la UNAM, De la Fuente Ramírez enfatizó que este será un órgano consultivo de los gobiernos federal y de la ciudad de México para avanzar en la prevención de desastres. Y que ahí serán los expertos de la UNAM los que contribuirán con sus aportaciones sobre el conocimiento de la red sísmica nacional y del monitoreo que se hace a través del Sismológico Nacional"

Consecuencias culturales

El terremoto también causó una reacción cultural como el poema “Las Ruinas de México (Elegía del Retorno)” por el poeta José Emilio Pacheco y la crónica Nada, Nadie por la escritora Elena Poniatowska.

En “Las Ruinas de México (Elegía del Retorno),” Pacheco explora el significado de la vida, la grandeza de la naturaleza contra la civilización, y la corrupción de la política como resultó de su experiencia del terremoto.
"Nada, Nadie" es una colección de los testimonios de muchas personas que presenciaron el terremoto y sus secuelas. Poniatowska recopiló los testimonios de los periódicos, de los discursos oficiales del gobierno, y más interesante aún, de las vivencias de la gente. Aquí mucha gente pudo expresar sus emociones después del temblor, donde se podía hablar y recordar el esfuerzo de la sociedad por salvar a personas heridas y vivas, a las personas muertas,etc.

Estas dos reacciones culturales al desastre son diferentes, pero nos ayudan a recordar y mantener este suceso en la memoria de nuestro país.